La moda japonesa estéticamente inspirada en la época rococó y victoriana traspasa barreras continentales de tal forma que actualmente se mezcla con otras culturas y da paso a nuevos diseños con tintes de otros países.
El estilo ahora no sólo se viste inspirado en las revistas del país nipón, también está siendo adaptado para tener un aire más fresco y distintivo en cada cultura, tomando un poco de cada lugar al que llega.
La Globalización hizo su trabajo
Hemos visto, por ejemplo, lolitas de Oriente Medio combinando sus coords con hermosos y coloridos hiyab a juego. A su vez en Europa, adaptándolo a un estilo más clásico, elegante y maduro.
Grandes marcas han creado prints con motivos religiosos e imágenes cristianas y es fácil pensar que esto seguirá creciendo. Sin ir más lejos, ya existen varios prints que incluso han tomado simbología satánica y de wicca para darle un nuevo aire al gothic.
Sería hermoso ver nuevos diseños y coordinados con coloridas flores, arte indocristiano, y también, imágenes arraigadas de nuestra cultura latinoamericana. Lo cierto es que referentes para algo así no escasean en nuestro continente: Las diferentes vírgenes, la Tirana, las criaturas de los pueblos originarios como Quetzacoatl y un larguísimo etc.
Todo esto es parte de la globalización, la cual dejar sacar lo más bello de cada lugar para ser fusionado con lo que nos apasiona a todas: el Lolita.
Deseamos que artistas y diseñadores tomen eso en cuenta para que el estilo tenga muchos más años que recorrer, más ideas frescas y más seguidores a través del mundo.
